Ucrania y Rusia: La misma estrategia contra drones
En medio del conflicto entre Ucrania y Rusia, una sorprendente similitud ha surgido en sus tácticas para combatir los drones de combate. Tanto las fuerzas ucranianas como las rusas han adoptado una solución ingeniosa e improvisada: furgonetas modificadas equipadas con un arsenal de armas diseñado específicamente para derribar drones.
Buggies Armados: Una Respuesta Innovadora
Estas furgonetas, a menudo basadas en el chasis del popular vehículo 4x4 Lada Niva, han sido equipadas con una torreta que alberga 24 cañones capaces de disparar municiones similares a perdigones. Este sistema de fuego múltiple busca maximizar las posibilidades de interceptar drones a baja altura creando un amplio área de impacto. Adicionalmente, se han incorporado lanzadores de bengalas para cegar las ópticas infrarrojas y de visión nocturna de los drones enemigos. Como complemento, muchas de estas unidades incluyen un montaje trasero con seis rifles AK-12, proporcionando una capacidad adicional contra objetivos terrestres y aéreos.
Eficacia y Limitaciones
Si bien esta táctica improvisada demuestra la capacidad de adaptación de ambos bandos ante la creciente amenaza de los drones, su eficacia real es objeto de debate. Pruebas realizadas han indicado que, incluso con impactos directos, las municiones de escopeta convencionales no siempre logran neutralizar drones modernos, algunos de los cuales pueden seguir operando a pesar de sufrir daños menores. La corta distancia efectiva de estas armas también representa una seria limitación en entornos de combate dinámicos.
Otra desventaja significativa es la necesidad de recargar rápidamente el sistema de 24 cañones después de cada disparo. Esta necesidad podría comprometer significativamente la capacidad de respuesta ante ataques múltiples. La investigación y desarrollo de municiones especializadas que mejoren el alcance y la efectividad letal se vuelven cruciales para mejorar la eficacia de este sistema.
Una Carrera Armamentista Tecnológica
El conflicto entre Ucrania y Rusia ha acelerado una carrera armamentista en el ámbito de las contramedidas de drones. El uso generalizado de drones kamikaze FPV, así como aquellos que lanzan pequeñas municiones, ha generado una necesidad urgente de soluciones defensivas que puedan implementarse rápidamente y a bajo costo. La estrategia de las furgonetas armadas es un ejemplo claro de esta adaptación tecnológica.
Sin embargo, las armas cinéticas, como las utilizadas en estos buggies, solo representan una parte de una solución más amplia. También se están implementando herramientas de guerra electrónica para interferir con las comunicaciones y sistemas de navegación de los drones. Una estrategia de defensa multicapa y más integrada parece necesaria para contrarrestar completamente la amenaza de los drones en el campo de batalla.
Fuente: Xataka