El veto encubierto de China
China respondió al ataque de Estados Unidos a su industria de chips con un inesperado embargo de exportación de minerales críticos: galio, germanio, grafito y antimonio. Pero la verdadera sorpresa estaba en la letra pequeña: la prohibición incluye la restricción de transbordos, impidiendo que terceros países suministren estos minerales a EEUU. Esto supone una escalada sin precedentes en la guerra comercial y afecta a sectores cruciales, desde las energías renovables hasta la fabricación de dispositivos electrónicos.
Impacto en la guerra de Ucrania
El impacto más notable es en el conflicto ucraniano. China también ha limitado las exportaciones de componentes clave para drones, incluyendo motores, baterías y controladores de vuelo. Considerando que China domina el 80% del mercado global de drones, esta restricción afecta directamente a Ucrania, que depende de estos componentes para su defensa. La escasez obligará a fabricantes occidentales a buscar alternativas, aunque la transición será compleja y costosa, dejando a Ucrania con una vulnerabilidad significativa.
La estrategia de China
Estas acciones de China parecen una respuesta directa a las sanciones de EEUU. Si bien Beijing niega suministrar armas letales a Rusia, informes sugieren que numerosos componentes chinos terminan en drones y armamento ruso. China, al parecer, busca mantener una “distancia crítica”, protegiendo su imagen internacional mientras fortalece su alianza con Moscú y aprovecha las oportunidades económicas.
El contraataque de Occidente
Occidente, liderado por Estados Unidos, ha intensificado las sanciones a China y está buscando diversificar sus cadenas de suministro para reducir su dependencia de los componentes chinos en áreas estratégicas como la defensa y la tecnología. La diversificación es clave para contrarrestar la influencia geopolítica de China y mitigar los riesgos en la producción de equipos clave.
Un juego geopolítico complejo
La situación ilustra la complejidad de la guerra económica y geopolítica actual. China, mediante el uso de restricciones selectivas y el suministro de bienes de doble uso, juega un papel fundamental en el conflicto de Ucrania. Mientras tanto, la respuesta de Occidente se centra en la diversificación para reducir las vulnerabilidades y contrarrestar las acciones de China.
El alto precio de la guerra comercial
El embargo de China afecta a la producción de drones en Ucrania y provoca una subida de precios de los componentes alternativos, incrementando el coste de la guerra. Esta situación refleja una escalada de la tensión geopolítica que podría tener consecuencias de largo alcance.
Fuente: Xataka