La dependencia europea de China en el sector de baterías

Europa se enfrenta a un gran desafío en su transición hacia la movilidad eléctrica: la dependencia casi total de China en la producción de baterías para vehículos eléctricos. El 85% de las baterías provienen de compañías chinas, creando una vulnerabilidad significativa para la industria automotriz europea.

Objetivos ambiciosos, planes insuficientes

Para 2035, la Unión Europea prohibirá la venta de coches de combustión que no sean neutros en CO2, impulsando la adopción de vehículos eléctricos. Sin embargo, el Tribunal de Cuentas Europeo ha advertido sobre la falta de planificación adecuada para satisfacer la creciente demanda de baterías. Se espera una escasez inminente de materias primas, especialmente después de 2030.

El fracaso de Northvolt y la presión sobre la UE

La quiebra de Northvolt en Estados Unidos, una de las grandes esperanzas europeas en la producción de baterías, ha puesto de manifiesto la fragilidad del sector en Europa. Alemania, Francia y Suecia han presionado a la Comisión Europea para que tome medidas más contundentes para promover la producción local de baterías y reducir la dependencia de China.

Materias primas y desafíos regulatorios

La producción de baterías requiere materias primas críticas como litio, manganeso, cobalto y grafito. Europa depende en gran medida de países como Australia, Sudáfrica, Gabón, la República Democrática del Congo y, sobre todo, China, para su suministro. Las regulaciones europeas, aunque ambiciosas, pueden resultar costosas y desincentivar la inversión en comparación con otros países.

Una transición verde que podría ser una transición china

La falta de autonomía en la producción de baterías plantea un riesgo significativo: la transición verde en Europa podría convertirse en una "transición china", con la industria europea altamente dependiente de un solo país para un componente crucial de sus vehículos eléctricos. El ejemplo de los paneles solares, donde Europa ha perdido competitividad frente a China, sirve como una advertencia.

El futuro de la industria automotriz europea

El reto es enorme. Europa necesita acelerar la producción de baterías, asegurar el acceso a materias primas críticas y crear un ecosistema industrial competitivo. De lo contrario, el sueño de una movilidad eléctrica europea podría verse comprometido por la dependencia de China.

Se espera que la UE tome medidas para diversificar su cadena de suministro, pero el tiempo apremia para evitar una mayor dependencia de China y garantizar la competitividad de la industria automotriz europea.


Fuente: Xataka