El giro inesperado de Silicon Valley
Las grandes empresas tecnológicas, tradicionalmente alineadas con el progresismo y el partido demócrata, están mostrando un acercamiento sorprendente al expresidente Trump. Este cambio de actitud se produce en un contexto de creciente presión regulatoria y amenazas a sus modelos de negocio.
Amenazas regulatorias y la búsqueda de aliados
En 2024, el panorama para las tecnológicas es muy diferente al de 2016. Investigaiones antimonopolio y legislaciones desfavorables las han puesto contra las cuerdas, amenazando con desmantelar sus imperios. Ante esta situación, Trump se presenta como una posible vía para evitar estas consecuencias.
El cambio de actitud de los CEOs
La cena de Mark Zuckerberg con Trump en Mar-a-Lago ha sido un punto de inflexión. Tim Cook, CEO de Apple, ha felicitado públicamente a Trump, un gesto que contrasta con su postura en 2016. Otros CEOs que antes evitaban la política, ahora buscan el favor del expresidente.
El impacto de las regulaciones globales
La presión regulatoria no se limita a Estados Unidos. Australia ha prohibido las redes sociales a los menores de 16 años, mientras que Canadá ha demandado a Google por prácticas anticompetitivas. La Unión Europea también ha implementado estrictas regulaciones, creando un ambiente hostil para las grandes tecnológicas.
Un cambio de prioridades
El crecimiento ya no es la única prioridad para estas empresas. La supervivencia ante las regulaciones se ha convertido en una preocupación fundamental. Este pragmatismo explica el acercamiento a Trump, visto ahora como un aliado empresarial, más que como una figura política a la que oponerse.
El fin de la era del activismo
El contexto actual, marcado por miles de despidos en el sector, ha impactado la cultura laboral. El activismo político ha disminuido, dando paso a una cultura corporativa más centrada en los resultados financieros. Las empresas tecnológicas priorizan su supervivencia y sus beneficios, dejando de lado las posturas ideológicas.
El futuro incierto del panorama digital
El futuro del sector tecnológico depende en gran medida de las acciones de Trump. La posible prohibición de TikTok, el desmembramiento de Meta, o la pérdida de la propiedad de Chrome por parte de Google, son solo algunos de los desafíos que se presentan. Los líderes tecnológicos son conscientes de este panorama y han optado por un enfoque más pragmático y menos ideológico.
Fuente: Xataka
