El enigma de Phobos y Deimos
Las lunas de Marte, Phobos y Deimos, son un misterio para los astrónomos. Su apariencia se asemeja más a asteroides que a las lunas de otros planetas. Su forma irregular y órbitas circulares han desafiado las explicaciones tradicionales.
Una nueva hipótesis: un disco de escombros
Una nueva teoría sugiere que Marte poseía, hace millones de años, un sistema de anillos o un disco de rocas y polvo. Un asteroide de gran tamaño habría sido capturado por la gravedad marciana, acercándose demasiado al planeta y fragmentándose.
La fragmentación del asteroide
Los restos del asteroide habrían seguido diferentes trayectorias: algunos impactaron en Marte, otros fueron expulsados al espacio, y otros quedaron orbitando el planeta. Estos últimos colisionaron entre sí, formando un disco de material alrededor de Marte. Con el tiempo, la gravedad unió las partículas de este disco, creando Phobos y Deimos.
Simulaciones por ordenador
Investigadores utilizaron simulaciones por ordenador para probar esta hipótesis, utilizando la herramienta de código abierto SWIFT. Los resultados mostraron la viabilidad de esta teoría, donde un disco de escombros pudo haber dado origen a las lunas de Marte.
La misión MMX: buscando respuestas
La futura misión Martian Moons eXploration (MMX) de la JAXA, con la colaboración de la NASA, recogerá muestras de las lunas marcianas. Analizar la composición de estas muestras será crucial para confirmar o refutar la hipótesis del disco de escombros. Si la composición es similar a la de asteroides, la teoría del origen asteroidal se fortalecerá. Si, por el contrario, se asemeja a la roca marciana, esto podría indicar que Phobos y Deimos son resultado de un impacto.
El futuro de la exploración marciana
Esta nueva hipótesis, aunque plausible, es solo una de varias. La misión MMX promete arrojar luz sobre el origen de Phobos y Deimos, resolviendo un enigma que ha intrigado a los científicos durante años. El análisis de las muestras permitirá comprender mejor la formación y evolución del sistema solar.
Fuente: Xataka