El Tech Prosperity Deal y la oleada de inversiones
Un acuerdo tecnológico entre Reino Unido y Estados Unidos, conocido como "Tech Prosperity Deal", ha impulsado una inversión masiva de 31.000 millones de libras (aproximadamente 35.460 millones de euros) por parte de gigantes tecnológicos estadounidenses. Este acuerdo, anunciado durante la visita de Donald Trump, promueve la colaboración en inteligencia artificial, computación cuántica y energía nuclear. Microsoft, Google, Nvidia y OpenAI son algunas de las empresas que han realizado importantes apuestas en el Reino Unido.
Un momento estratégico
La coincidencia del acuerdo con la visita de estado de Trump no es casual. El "Tech Prosperity Deal" busca estimular el crecimiento económico y la investigación científica en ambos países. Para el gobierno británico, este acuerdo representa una oportunidad crucial para impulsar su economía y posicionarse como líder tecnológico.
Fuera de la UE, regulación más laxa
La ausencia de Reino Unido de la Unión Europea ha sido fundamental para atraer estas inversiones. La regulación menos estricta en IA en comparación con la UE ha hecho al país muy atractivo para las empresas estadounidenses.
Microsoft lidera la inversión
Microsoft ha invertido 22.000 millones de libras (25.334 millones de euros), incluyendo la construcción del superordenador más grande del Reino Unido. El CEO de Microsoft, Satya Nadella, destacó la importancia de la colaboración entre Estados Unidos y Reino Unido.
Otras empresas también invierten
Nvidia desplegará 120.000 unidades de procesamiento gráfico en Europa, la mayor parte en Reino Unido. Google mantiene su inversión de 5.000 millones de libras (5.758 millones de euros). CoreWeave, Salesforce, Scale AI, BlackRock, Oracle y Amazon Web Services también han realizado importantes inversiones.
Regulación ligera y estrategia de Starmer
El gobierno británico busca atraer más inversión tecnológica estadounidense a través de una regulación menos estricta en áreas como la IA. Esta estrategia aprovecha la posición de Estados Unidos como principal socio comercial del Reino Unido, y la postura crítica de la administración Trump hacia la regulación europea de la seguridad digital.
El futuro del acuerdo
El "Tech Prosperity Deal" también abarca la colaboración en IA aplicada a la salud, la computación cuántica y los proyectos nucleares civiles. El acuerdo busca moldear el futuro de millones de personas y consolida la posición de Reino Unido como un centro tecnológico en Europa, mientras que las empresas estadounidenses obtienen una vía de acceso al mercado europeo sin las restricciones de la UE.
El impacto de las inversiones
Las inversiones de las grandes empresas tecnológicas en el Reino Unido tienen el potencial de transformar el panorama tecnológico del país, creando empleos y fomentando la innovación. Sin embargo, también plantean interrogantes sobre la competencia y la soberanía tecnológica.
Las implicaciones a largo plazo de este acuerdo y su impacto en la regulación de la IA en Europa aún están por verse, pero es evidente que el Reino Unido se ha posicionado como un actor clave en el desarrollo de esta tecnología.
Fuente: Xataka