Honda: Más allá de los coches eléctricos

Honda, reconocida por su fiabilidad, ha generado sorpresa al afirmar que los vehículos eléctricos no representan su objetivo final. Su enfoque principal radica en la neutralidad de carbono para 2050, considerando los coches eléctricos como una herramienta, pero no la única, para alcanzar dicha meta.

Una estrategia híbrida

Si bien Honda continúa desarrollando coches eléctricos e invirtiendo en tecnologías como las baterías de estado sólido, su estrategia a corto plazo se centra en los híbridos. Directivos de la empresa argumentan que, a pesar del auge mediático de los vehículos eléctricos, la demanda de híbridos sigue siendo mayor, especialmente en el creciente sector de los SUV. Este fenómeno se atribuye a la dificultad que supone para los consumidores adaptarse a cambios significativos de comportamiento.

El papel de los híbridos

El éxito de los SUV híbridos es evidente en el mercado español, donde varios modelos ocupan puestos destacados entre los más vendidos. La preferencia por los híbridos no se limita a España; se observa una tendencia similar en otros mercados. Esta preferencia, según Honda, refuerza su estrategia híbrida a corto plazo.

Explorando otras alternativas

Además de los híbridos y los eléctricos, Honda explora otras tecnologías, como la pila de combustible de hidrógeno, que ofrece ventajas en cuanto a tiempos de carga. Sin embargo, esta tecnología se enfrenta al desafío de la limitada infraestructura de repostaje a nivel mundial.

Un enfoque gradual

Honda mantiene un plan claro para 2040: vender exclusivamente vehículos eléctricos y de pila de combustible. Esta visión a largo plazo sugiere una transición gradual hacia la electrificación completa, alineada con la flexibilización de plazos gubernamentales para la eliminación de los vehículos de combustión interna.

Alineación con otras grandes compañías

La estrategia de Honda concuerda con la de otros grandes fabricantes, como Toyota, que también prioriza los híbridos y muestra escepticismo sobre la rápida adopción masiva del coche eléctrico. Renault y Volvo también comparten una postura similar, abogando por plazos más flexibles para la transición a la movilidad eléctrica y resaltando las limitaciones de infraestructura actuales. Esta visión se refuerza con la reciente disminución en las ventas de Tesla, que muestra una perspectiva menos optimista en cuanto a la demanda inmediata de coches totalmente eléctricos.

Conclusión

La estrategia de Honda refleja una visión a largo plazo hacia la neutralidad de carbono, donde los coches eléctricos son un elemento fundamental, pero no el único. La empresa apuesta por una transición gradual, basada en las necesidades del mercado y en las limitaciones de infraestructura, privilegiando en el corto plazo los vehículos híbridos, mientras continúa la investigación en otras tecnologías como el hidrógeno.

Fuente: Xataka