El fin de una larga ola de calor

Tras una ola de calor intensa y prolongada, España experimenta un descenso de las temperaturas. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha declarado oficialmente el fin de la tercera ola de calor más larga en muchos años. Pero, ¿se mantendrá este respiro o volverá el calor extremo?

Días de calma, ¿o un breve respiro?

Las previsiones meteorológicas apuntan a varios días con temperaturas normales, e incluso algo por debajo de lo habitual para esta época del año. Si bien se espera un ligero aumento de las temperaturas hacia finales de semana y principios de la próxima, no se prevé una situación de calor extremo. Las anomalías térmicas podrían ser incluso de hasta nueve grados bajo la media en algunas zonas del centro peninsular.

El huracán Erin: un factor clave

Expertos analizan el impacto de la tormenta tropical Erin, que se intensificó hasta convertirse en huracán en el Atlántico occidental. Su trayectoria, virando hacia el norte y noreste, podría influir en la circulación atmosférica en Europa.

Impacto en la circulación atmosférica

La entrada de este ciclón en latitudes medias podría modificar la predicción meteorológica a medio plazo. El huracán Erin, al reestructurarse y dirigirse hacia el norte, podría causar un cambio significativo en la circulación atmosférica y el jet stream sobre el Atlántico. Este fenómeno podría intensificar el efecto de enfriamiento que se está experimentando, llevando a una dinámica atmosférica más parecida a la del otoño.

Incertidumbre e impactos a futuro

Aún es pronto para determinar con certeza el impacto de Erin en Europa. Aunque alcanzará la región como tormenta subtropical o ciclón post-tropical, a latitudes superiores a las españolas, su influencia en la dinámica atmosférica podría prolongar el descenso de las temperaturas. El huracán Erin, a pesar de su intensidad inicial como huracán categoría 5, representa una buena noticia, pues su llegada podría representar la consolidación de un descenso en las temperaturas que ya se está experimentando.

El mar Mediterráneo: una preocupación adicional

Mientras tanto, la temperatura del mar Mediterráneo, especialmente en Baleares, se mantiene alta, lo que preocupa a los meteorólogos. El Mediterráneo actúa como una “olla a presión”, con el potencial de influir en las temperaturas terrestres. La evolución de esta situación requerirá seguimiento.

Fuente: Xataka