Scott Jacqmein aceptó una oferta tentadora: 750 dólares y un viaje a cambio de ceder su imagen para la creación de un avatar digital durante un año. Lo que parecía una oportunidad profesional se convirtió en una experiencia desconcertante. Su doble digital, generado por inteligencia artificial, ahora protagoniza anuncios en TikTok, promocionando horóscopos, suplementos y seguros en varios idiomas. La ironía: Jacqmein reside en Dallas y nunca grabó esos anuncios; su rostro, sin su característica barba, se utiliza sin su consentimiento pleno.
Un Contrato con Consecuencias Inesperadas
Jacqmein firmó una licencia de uso de su imagen por doce meses, sin cláusulas de regalías ni representación legal. El contrato no fue directamente con TikTok, sino con una agencia externa que recopila imágenes de actores para generar avatares con fines publicitarios. En ese momento, Jacqmein no comprendió completamente el alcance del uso de su imagen digital. El acuerdo no especificaba el tipo de campañas en las que aparecería.
El Desconcierto de un Doble Digital
Ver su doble digital hablando otros idiomas y mostrando expresiones que no son propias resultó una experiencia sorprendente e inquietante para Jacqmein. La única parte real en estos anuncios es su rostro y voz, cedidos bajo contrato. A pesar de la etiqueta “AI-generated”, el realismo de los avatares podría engañar a los usuarios, haciéndolos creer que se trata de testimonios auténticos.
TikTok y la Publicidad con Avatares de IA
Según informes, el avatar de Jacqmein forma parte de un catálogo que TikTok ofrece a las empresas como herramienta publicitaria. Los anunciantes pueden seleccionar perfiles con diferentes características y generar videos directamente desde la plataforma, sin necesidad de grabaciones tradicionales. Esta función, gratuita para las marcas, se encuentra en la suite creativa Symphony de TikTok.
Un Contrato Ambiguo y Consecuencias Legales
Jacqmein carece de mecanismos contractuales para detener el uso de su avatar. La licencia, firmada en algún momento de 2024, no especifica la duración exacta del uso de su imagen. Incluso en meses recientes, conocidos lo han identificado en anuncios de TikTok, lo que sugiere que su imagen sigue siendo utilizada. Jacqmein lamenta no haber negociado restricciones sobre los productos, idiomas o contextos en los que su avatar podría utilizarse.
Las Implicaciones de la IA en la Imagen y la Voz
La historia de Jacqmein ejemplifica los riesgos potenciales en un entorno donde la inteligencia artificial replica rostros y voces con facilidad. Aunque no se sabe si todos los acuerdos de este tipo son similares, este caso revela la importancia de definir claramente los términos contractuales. En el mundo digital, las oportunidades crecen, pero también las consecuencias de las decisiones que tomamos.
A la izquierda, el avatar de Scott Jacqmein creado por IA para anuncios en TikTok. A la derecha, el actor en una imagen real tomada durante un paseo.
Fuente: Xataka