El apetito chino por nuevos mercados

La industria automotriz china está en una ambiciosa expansión global, buscando conquistar nuevos mercados en Latinoamérica y África. Tras enfrentar aranceles y restricciones en Europa y Estados Unidos, las empresas chinas están aprovechando las menores barreras comerciales y el gran potencial de crecimiento en estas regiones.

Estrategias para superar obstáculos

Para evitar los aranceles y las regulaciones, las compañías chinas están implementando estrategias innovadoras. Además de la importación directa de vehículos, se enfocan en expandir su red de concesionarios en Europa y operar sus propias fábricas. El uso de "kits de quita y pon" es otra táctica para eludir las restricciones comerciales.

África y Latinoamérica: un terreno fértil

África, particularmente el norte del continente, y algunos países latinoamericanos se destacan por sus políticas que incentivan la industria y sus menores trabas aduaneras. Marcas como BYD han ajustado sus estrategias internacionales, priorizando estos mercados alternativos con un menor nivel de protección comercial.

El caso de Marruecos: un puente estratégico

Marruecos es un ejemplo claro de la estrategia china. Con una sólida industria automotriz y acuerdos comerciales con otros países, su ubicación geográfica estratégica lo convierte en una puerta de entrada al Mediterráneo y al Atlántico. China está estableciendo alianzas para la fabricación de baterías y otros componentes clave del vehículo eléctrico en la región.

Abastecimiento de minerales críticos

La abundancia de minerales críticos, como el cobalto y las tierras raras, en estas regiones es otro factor atractivo para la industria china. China busca fortalecer su posición en la cadena de suministro global de estos recursos estratégicos.

Satisfaciendo una demanda insatisfecha

La expansión china también se enfoca en satisfacer la demanda insatisfecha de vehículos en estos mercados emergentes. La baja propiedad de vehículos en países como Sudáfrica, Argelia, Egipto o Nigeria representa una enorme oportunidad de crecimiento. La presencia de plantas de ensamblaje, como la de BYD en Brasil, también indica la intención de fabricación local.

La competencia de Japón

Aunque las empresas chinas están avanzando con fuerza, existe una competencia significativa. Las marcas japonesas, particularmente a través de la exportación de vehículos usados, han tenido presencia considerable en África y Oriente Medio. Sin embargo, China se está posicionando para superarlas.

El futuro de la industria automotriz en África y Latinoamérica

Se proyecta un crecimiento significativo de la cuota de mercado de las marcas chinas en África y Oriente Medio, pasando del 10% en 2024 a un estimado del 34% en 2030. La estrategia china es doble: vender en estos mercados emergentes y, simultáneamente, establecer capacidad de fabricación local para ampliar su alcance a mercados más consolidados.