Descubre Torre la Sal, un encantador pueblo pesquero en Castellón donde el tiempo parece haberse detenido. A tan solo 2 kilómetros de una playa espectacular, este pequeño núcleo urbano te ofrece una experiencia auténtica y alejada del turismo masivo.

Un Viaje al Pasado

Imagina un lugar con apenas 60 casitas bajas y tradicionales, levantadas hace un siglo y cuidadosamente conservadas. En Torre la Sal, el encanto de lo antiguo se respira en cada rincón. Sus casas blancas, abrazadas por el mar, evocan una época de calma y tranquilidad, un remanso de paz lejos del ritmo frenético de la vida moderna.

Un Ambiente Auténtico

Olvídate de centros comerciales y tiendas de souvenirs. En Torre la Sal, encontrarás la esencia de un pueblo pesquero auténtico, con la inigualable armonía entre la tierra y el mar. Aquí, los sonidos del mar y el aroma a salitre te envuelven en una atmósfera única, invitándote a desconectar del mundo exterior.

Más que una Playa

Torre la Sal ofrece una playa de 2 kilómetros de arena y grava, con aguas cristalinas y un paseo marítimo de madera, perfecto para paseos relajantes. Además de su belleza natural, la playa es ideal para los deportes acuáticos y su limpieza la convierte en el hogar de un centro de investigación biológica marina.

Patrimonio Histórico

Este pequeño pueblo guarda un tesoro histórico: la Torre de la Sal, una torre defensiva cuadrada del siglo XVI declarada Bien de Interés Cultural. En su pasado, protegió la costa de ataques piratas; más tarde, sirvió como almacén de sal. Muy cerca, se encuentran los restos de un yacimiento ibérico, un testimonio más del rico patrimonio de la zona.

Una Escapada Inolvidable

Torre de la Sal es una opción ideal para quienes buscan una escapada tranquila, alejada del bullicio turístico. Un lugar para disfrutar de la belleza natural, la rica historia y la auténtica vida local. Ven y descubre el encanto de este pueblo donde el tiempo se detuvo.

Fuente: Trendencias