
El problema silencioso de los sedimentos
La próxima gran sequía es inevitable. Pero existe un factor crucial que agrava la situación y que muchos desconocen: la acumulación de sedimentos en los embalses españoles. Esta problemática, que reduce drásticamente la capacidad de almacenamiento de agua, está pasando desapercibida, dificultando la gestión eficiente de los recursos hídricos.
El "ladrón silencioso"
Décadas de acumulación de sedimentos –lodos, arenas y otros materiales– han reducido significativamente el volumen útil de muchos embalses. Es difícil calcular con exactitud la proporción de espacio ocupado por estos sedimentos en cada caso, convirtiendo los datos oficiales en meras estimaciones. Incluso durante periodos de abundancia hídrica, algunos embalses tuvieron que liberar agua debido a la falta de espacio, agua que podría haberse conservado para afrontar periodos de escasez. Este problema ha sido denominado el "ladrón silencioso" de los embalses.
¿Solución? Convivir o dragar
La acumulación de sedimentos es un fenómeno natural, inherente a la creación de embalses. Por ello, las soluciones se reducen a dos: la convivencia con los sedimentos o el dragado periódico para eliminarlos. La primera opción, la convivencia, requiere un monitoreo preciso de la situación. La velocidad de acumulación varía según las características del embalse: su forma, la velocidad del agua, y la composición del lecho fluvial aguas arriba. Estudios batimétricos del lecho lacuestre podrían ofrecer información detallada sin necesidad de vaciar los embalses.
Diversidad en las estimaciones
La falta de información precisa sobre la acumulación de sedimentos es alarmante. Algunos estudios ofrecen resultados muy dispares. Mientras que un estudio de 2018 estimaba una acumulación insignificante en la Confederación Hidrográfica del Tajo, otros estudios, como el de la Confederación Hidrográfica del Segura, apuntan a una pérdida de capacidad entre un 10% y un 40%. Un estudio más amplio, realizado en 110 embalses, estimó una pérdida de capacidad cercana al 5%, un valor intermedio pero aún preocupante.
El dragado: una solución costosa
El dragado de los embalses, aunque costoso y complejo debido a la gran cantidad de embalses en España, parece la solución más efectiva para recuperar la capacidad original de almacenamiento. Sin embargo, requiere una importante inversión. En 2024, se iniciaron operaciones de dragado en el embalse del Ebro con un presupuesto de 2,5 millones de euros, para liberar uno de los desagües bloqueado por sedimentos.
Fuente: Xataka