Un Juego de Ajedrez Geopolítico
La OTAN ha planteado un escenario de pesadilla: si China ataca Taiwán, Rusia y Corea del Norte podrían responder atacando a Europa. Este movimiento en el tablero geopolítico podría desencadenar una guerra de proporciones inimaginables.
El Temor a la Escalada
La creciente tensión entre China y Taiwán, exacerbada por la guerra en Ucrania, ha elevado el riesgo de conflicto. La invasión rusa de Ucrania sirve como modelo de cómo podría responder Pekín y la comunidad internacional a una eventual invasión china de Taiwán. El escenario presentado por la OTAN implica una respuesta coordinada de Rusia y Corea del Norte, generando un conflicto global.
El Llamado al Rearme
El Secretario General de la OTAN ha enfatizado la necesidad urgente de rearmarse para disuadir a Rusia y China. No obstante, la amenaza de un conflicto en Europa mientras China ataca Taiwán representa un desafío crucial que requiere una respuesta estratégica robusta.
La Pinza Estratégica: China y Rusia
La creciente alianza entre China y Rusia, que se apoyan mutuamente en sus conflictos respectivos (Rusia con apoyo técnico chino en Ucrania, y China beneficiándose de la distracción estadounidense en Europa), genera una preocupante “pinza” estratégica. La amenaza de un ataque coordinado de ambas potencias contra Taiwán y Europa simultáneamente es considerada muy real.
El Horizonte de 2027
Informes de inteligencia occidentales apuntan a que China planea una posible toma de Taiwán para 2027. Mientras, estimaciones indican que Rusia podría recuperar sus capacidades para atacar a la OTAN hacia 2029, creando la posibilidad de un doble frente a finales de la década que pondría a prueba la capacidad de respuesta de Estados Unidos.
Actores de Saturación: Irán y Corea del Norte
Además de Rusia, China cuenta con otros aliados estratégicos como Corea del Norte e Irán. Estos países podrían realizar acciones de “guerra gris” para desviar recursos y atención estadounidenses, dificultando la respuesta a una invasión china de Taiwán.
Estrategia de Desgaste
El éxito de una invasión china de Taiwán depende de la capacidad de China para evitar que Estados Unidos concentre rápidamente sus fuerzas en la región. La estrategia de disuasión asimétrica incluye la utilización de Rusia, Corea del Norte y los conflictos en Oriente Medio para desgastar la capacidad de respuesta de Estados Unidos y sus aliados.
Washington y la Disuasión Impredecible
La administración Trump, a través de sus acciones impredecibles, como el bombardeo de Irán, intentó disuadir a China. Sin embargo, sus declaraciones contradictorias sobre la OTAN generan incertidumbre sobre el compromiso estadounidense en un conflicto global. Esta ambigüedad estratégica podría fomentar errores de cálculo.
Europa se Prepara
El escenario planteado por la OTAN ha impulsado una reconfiguración del poder militar occidental. Europa busca fortalecer su defensa, liberando recursos estadounidenses para centrarse en contener a China en el Indo-Pacífico. Medidas como el aumento del gasto militar y la preparación de puertos para el manejo de material bélico reflejan esta nueva realidad.
El Peor Escenario
El principal debate estratégico se centra en la capacidad de Estados Unidos para afrontar un conflicto simultáneo en Europa y Asia. La amenaza en Finlandia, los Balcanes o el Mar Báltico podría llevar a una situación insostenible para Washington. Se requiere una respuesta estratégica integral que incluya la modernización de los ejércitos y una mayor cooperación entre los aliados.
