
El mundo tecnológico se debate entre la innovación y la imitación. ¿Hasta qué punto las grandes empresas tecnológicas, las Big Tech, copian o compran a sus competidores? Un artículo reciente revela una estrategia recurrente: la adquisición o la réplica de tecnologías emergentes para evitar ser superadas.
De Google Video a YouTube: una compra estratégica
Google lanzó Google Video semanas antes que YouTube, pero la superioridad de YouTube fue innegable. La solución de Google fue clara: comprar YouTube para controlar el mercado. Este patrón se repite a lo largo de la historia de las Big Tech.
Facebook e Instagram: un ejemplo de compra para la competencia
Otro caso representativo es la adquisición de Instagram por parte de Facebook. Al percibir a Instagram como una amenaza potencial, Facebook optó por comprarla y integrarla en su ecosistema. De esta manera, se eliminó la competencia directa y se aseguró el éxito de la plataforma.
La imitación como estrategia: Snapchat, TikTok y otros
La imitación también juega un papel importante en la estrategia de las Big Tech. Facebook e Instagram copian características de otras aplicaciones, como las historias de Snapchat o los Reels de TikTok. Aunque este método puede resultar exitoso en algunos casos, en otros puede conducir al fracaso, como pasó con Google Reader.
El dilema del innovador: mantenerse en la cima
El dilema del innovador es una realidad para las Big Tech. Se trata de una situación en la cual las grandes empresas se enfrentan a la necesidad de innovar constantemente, al mismo tiempo que deben protegerse de la competencia. Este dilema explica, en gran medida, las estrategias de copia y adquisición que emplean.
El auge de la IA: OpenAI y la nueva amenaza
El surgimiento de OpenAI y ChatGPT ha despertado una nueva ola de competencia en el campo de la inteligencia artificial. Las Big Tech se encuentran nuevamente en la tesitura de responder a un nuevo competidor, buscando alianzas estratégicas o desarrollando sus propias alternativas para evitar perder terreno. La adquisición de WindSurf por parte de OpenAI es un ejemplo reciente de esta dinámica.
La carrera por la IA: un mercado dominado por unos pocos
Desde herramientas para crear imágenes, música o video, hasta plataformas de programación como Cursor, Google (Jules), Microsoft (GitHub Copilot), Amazon (CodeWhisperer), y otras. La variedad de opciones es amplia, pero la concentración en manos de las Big Tech es inminente. Si una idea se populariza, las Big Tech la copian o la compran.
El futuro parece apuntar hacia un mercado de la IA dominado por un pequeño número de gigantes tecnológicos, dejando a las startups con una difícil batalla por la supervivencia.
Fuente: Xataka