Telefónica presentó resultados del primer trimestre de 2025 que, a primera vista, parecen positivos: aumento de ingresos, mejora de márgenes en mercados clave y reducción de deuda. Sin embargo, el beneficio neto cayó un 26% y el flujo de caja libre fue negativo, dejando una sensación de estancamiento.

Resultados contradictorios

La caída contable se atribuye principalmente a la salida de Argentina y Perú, pérdidas ya anticipadas. Pero el problema va más allá de las cuentas: Telefónica recorta más de lo que crece, mejorando sus márgenes por desinversiones, no por una mejor gestión de activos. A pesar de ello, la rentabilidad operativa aumentó un 0,4%, lo que refleja una mayor eficiencia.

Una paradoja: eficiencia sin crecimiento

La paradoja radica en que, a pesar de ser más eficiente, Telefónica vale menos. La mejora en los fundamentales no se traduce en una narrativa convincente para el mercado, que busca visión, impulso y crecimiento. Aunque la cotización ha alcanzado máximos de los últimos tres años, aún no se observa un despegue significativo.

Telefónica Tech: el futuro incierto

Telefónica Tech, la división tecnológica, muestra un crecimiento del 6,6%, superando al grupo y alcanzando una facturación anualizada comparable a una mediana del IBEX. Sin embargo, la falta de transparencia en su rentabilidad y la ausencia de presentación como una unidad autónoma dificultan su valoración por parte del mercado.

España: un motor de crecimiento

En España, Telefónica ha logrado un crecimiento impensable anteriormente, impulsado por el aumento de ingresos y márgenes (alrededor del 2%). El crecimiento en ventas de terminales fue notable (casi 18%), mientras que la tasa de cancelación se mantuvo estable. El acuerdo con Vodafone para el despliegue de Fiberpass añade 3,65 millones de hogares potenciales.

El ARPU como indicador clave

El ARPU convergente en España (92,3 euros) es el más alto del grupo, indicativo de la alta rentabilidad de los clientes premium. Esto demuestra que España ha dejado de ser una rémora para convertirse en un motor de crecimiento para Telefónica.

La necesidad de una nueva narrativa

La gran pregunta es por qué Telefónica no se revaloriza a pesar de su buen desempeño. La respuesta podría ser la falta de una narrativa atractiva que impulse la confianza del mercado. La ejecución eficiente es fundamental, pero sin una visión clara del futuro y un relato convincente, los números por sí solos no bastan para atraer inversión.

Fuente: Xataka