
El desplome de Tesla
Tesla, la empresa que alguna vez aspiró a superar a Toyota en eficiencia, enfrenta una profunda crisis. En el primer trimestre de 2025, sus beneficios se desplomaron un 71% comparado con el mismo período de 2024. De no ser por la venta de créditos regulatorios, la compañía habría entrado en números rojos. Esta situación marca un giro drástico en la trayectoria de la empresa, que hasta hace poco experimentaba un crecimiento meteórico.
Caída en las ventas y producción
Las ventas del Tesla Model Y, anteriormente el vehículo más vendido del mundo, disminuyeron significativamente en 2024, perdiendo su posición dominante. La renovación del modelo, aunque esperada, afectó negativamente las cifras de venta. La producción de los modelos 3 y Y cayó un 16% en el primer trimestre de 2025, mientras que las entregas bajaron un 12%. Otros modelos, incluyendo el Cybertruck, tampoco lograron alcanzar las expectativas, con una reducción del 24% en las ventas.
Resultados financieros negativos
Los ingresos por la venta de vehículos en el primer trimestre de 2025 fueron considerablemente inferiores a los del mismo periodo de 2024, generando un beneficio de sólo 409 millones de dólares. Esta cifra es alarmante, considerando que sin la venta de créditos regulatorios, Tesla hubiera registrado pérdidas. El informe de resultados revela que la rentabilidad de la compañía ha caído a sus niveles más bajos desde 2021.
Problemas en la imagen de marca y nuevos modelos
La controversia generada por las actividades políticas de Elon Musk han impactado negativamente la imagen de la marca, además de problemas para lanzar un nuevo modelo de vehículo eléctrico más económico y asequible. Este modelo, clave para impulsar las ventas, se ha retrasado. La competencia en el sector está creciendo, con empresas que ofrecen vehículos con una buena relación calidad-precio similar a la de Tesla.
El futuro de Tesla
Tesla se enfrenta a un panorama complejo. La caída en las ventas, los problemas financieros y la imagen pública deteriorada plantean serias dudas sobre su futuro. Si bien el CEO ha anunciado su intención de reducir su implicación en el gobierno para dedicarse a la compañía, el camino a la recuperación se presenta largo y difícil. La capacidad de Tesla para superar estos desafíos y retomar su crecimiento dependerá de su capacidad de adaptarse al mercado, lanzar nuevos productos competitivos y recuperar la confianza de los inversores.
Fuente: Xataka