Mientras Europa duda, España ha aprovechado la guerra comercial para obtener importantes concesiones de China. Esta estrategia audaz, realizada en un momento crítico, busca corregir la significativa asimetría comercial entre ambos países, con un déficit español cercano a los 40.000 millones de euros.
Una jugada maestra en medio del conflicto
El acercamiento entre Pedro Sánchez y Xi Jinping en Pekín ha generado más que simples cumplidos diplomáticos. España ha optado por la acción unilateral, aprovechando la necesidad de China de aliados europeos ante el aislamiento impuesto por Estados Unidos. Esta táctica permite obtener concesiones comerciales que en circunstancias normales serían difíciles de conseguir.
Como resultado de esta iniciativa, se han firmado cuatro protocolos para desbloquear las exportaciones españolas de productos como porcino, cerezas, medicamentos y cosméticos. Un claro ejemplo de cómo ambas partes han encontrado beneficio mutuo: China logra mejorar su imagen internacional, mientras España avanza en la corrección de su desequilibrio comercial.
Un equilibrio delicado entre Estados Unidos y China
La estrategia española busca un espacio entre la tensión comercial entre Estados Unidos y China. La decisión de Trump de paralizar los aranceles a todos los países excepto China ha abierto una ventana de oportunidad. Este receso de tres meses permite a España obtener ventajas comerciales con China antes de que la tensión se reavive.
España ha logrado acuerdos concretos, a diferencia de Bruselas, que aún se encuentra en un proceso de debate. Este es el éxito de la estrategia española: transformar la incertidumbre geopolítica en oportunidades comerciales. España ha demostrado que se puede pescar en río revuelto.
El tiempo dirá si la estrategia es exitosa
Si bien la estrategia española ha logrado avances significativos, el tiempo revelará si estas concesiones son suficientes para reequilibrar la balanza comercial o si se limitan a gestos simbólicos por parte de China. Sin embargo, ya ha demostrado que la audacia y la acción rápida pueden generar mejores resultados que la indecisión y la espera.
España se ha aprovechado de una oportunidad que podría ser temporal, pero que tiene el potencial de generar beneficios duraderos una vez que la situación geopolítica se estabilice.
Fuente: Xataka