El gigante del lujo, Hermès, ha respondido a las tensiones arancelarias impuestas por Estados Unidos y la creciente competencia china con una estrategia audaz: fortalecer su producción artesanal en Europa. La marca, conocida por sus bolsos icónicos y listas de espera interminables, no se plantea deslocalizar su producción.
Una respuesta artesanal a la globalización
En lugar de trasladar su producción a Estados Unidos para evadir aranceles, Hermès redobla su apuesta por el "Hecho en Francia". La firma francesa planea abrir cuatro nuevos talleres en el país en los próximos cuatro años, generando más de 1000 empleos. Esta decisión se alinea con la estrategia de otras marcas de lujo europeas como Ferrari y Rolls-Royce, que también priorizan la producción local y la manufactura artesanal.
El lujo, un escudo contra los aranceles
Hermès, al igual que otras marcas de lujo, absorbe el impacto de los aranceles incrementando los precios en Estados Unidos. La estrategia se basa en la convicción de que sus clientes de alto poder adquisitivo no se verán disuadidos por un aumento del 10% o 20% en el precio final. Este aumento de precios, según la marca, sólo afectará al mercado estadounidense.
Expansión y creación de empleo en Francia
Los nuevos talleres estarán ubicados en Colombelles (apertura prevista para 2028, especializada en bolsos Kelly y Constance), Isle d’Espagnac (apertura a finales de 2025), Loupes (2026) y Charleville-Mézières (2027). Cada taller empleará aproximadamente 260 artesanos, todos formados en la prestigiosa École Hermès des savoir-faire.
El valor de la escasez y la exclusividad
Hermès mantiene su estrategia de producción limitada, basada en la exclusividad y la escasez. Esta táctica ha demostrado ser altamente rentable, lo que la ha llevado a superar a LVMH como la empresa de lujo más valiosa del mundo. El crecimiento constante de Hermès se refleja en sus resultados financieros del primer trimestre de 2025, con un aumento del 8,5% en la facturación.
Desmintiendo los mitos de la producción en China
La marca desmiente los rumores en redes sociales que afirman que sus productos son fabricados en China a bajo coste. Hermès afirma que sus bolsos y artículos de cuero son elaborados en sus 20 talleres franceses, destacando el valor añadido de la producción artesanal europea como un elemento clave de su estrategia.
Un futuro hecho a mano
La respuesta de Hermès a los desafíos del mercado global es un claro ejemplo de cómo la estrategia de lujo puede pivotar hacia la exclusividad y la artesanía, consolidando su posición en un sector altamente competitivo y demostrando que la calidad artesanal sigue siendo un activo valioso.
Fuente: Xataka