El ambicioso proyecto de convertir al Santiago Bernabéu en un nuevo epicentro de conciertos en Europa ha sufrido un duro golpe. La cancelación de las actuaciones de Aitana, inicialmente programadas para junio y posteriormente trasladadas a julio en el Wanda Metropolitano, ha puesto en entredicho la viabilidad de este plan.

Problemas de ruido y normativa municipal

La razón principal detrás de la cancelación parece ser la persistencia de problemas con la normativa municipal sobre ruido en el estadio. A pesar de que se esperaba una solución para marzo de 2025, las dificultades técnicas han impedido el cumplimiento de las regulaciones, obligando a otros artistas como Lola Índigo, Dellafuente y Ibai Llanos a reubicar sus eventos. El caso de Aitana, sin embargo, es especialmente significativo, ya que marca un punto de inflexión en las aspiraciones de Madrid.

Un proyecto multimillonario en crisis

La remodelación del Santiago Bernabéu, con una inversión que asciende a 1.100 millones de euros, tenía como objetivo transformar el estadio en un espacio multifuncional, capaz de albergar grandes conciertos durante todo el año gracias a su techo retráctil. Sin embargo, las quejas vecinales por el ruido y las aglomeraciones están poniendo freno a este plan. Una asociación de afectados ha expresado su preocupación por el impacto de los conciertos en la vida cotidiana del vecindario.

El éxito de Taylor Swift: una excepción que confirma la regla

El concierto de Taylor Swift en 2024, que movilizó 79 millones de euros en la economía madrileña, se presentó como una prueba de fuego para el Bernabéu. Si bien fue un rotundo éxito, este caso particular no ha logrado ocultar los problemas de fondo relacionados con la insonorización del estadio. El éxito de Taylor Swift, a pesar de las circunstancias, no soluciona el problema central.

El futuro incierto del Bernabéu como recinto para conciertos

Con la cancelación de Aitana y la persistencia de problemas de ruido, el futuro del Santiago Bernabéu como un importante escenario para conciertos a gran escala permanece incierto. La comparación con otros recintos europeos de gran capacidad, tanto cubiertos como al aire libre, pone de manifiesto la necesidad de una solución definitiva a los problemas acústicos del estadio si Madrid quiere competir como una capital europea de la música en vivo.

El impacto económico y turístico

La apuesta del Ayuntamiento de Madrid por convertir el Bernabéu en un centro de conciertos estaba respaldada por las cifras de 2024. Sin embargo, la incertidumbre sobre la solución del problema de ruido pone en jaque las expectativas de ingresos y el posicionamiento de Madrid en el mercado de eventos internacionales.

Fuente: Xataka