El programa Starship de SpaceX ha sufrido un nuevo y devastador golpe. Por segunda vez consecutiva, el cohete ha explotado durante su vuelo de prueba, marcando el mayor revés en la historia reciente del ambicioso proyecto espacial.
Desastre en el Vuelo
La Starship 34, la segunda de la nueva generación Block 2, sufrió una falla catastrófica aproximadamente ocho minutos después del despegue. Al igual que su predecesora, la Starship 33, la explosión ocurrió durante la fase de apagado de los motores, justo antes de iniciar la trayectoria suborbital hacia el océano Índico. El cohete perdió el control tras la explosión de varios motores, girando sobre su eje hasta finalmente estallar.
Espectáculo y consecuencias
La reentrada de los restos del cohete fue un espectáculo impresionante, con videos que circularon rápidamente en redes sociales mostrando la espectacular desintegración en la atmósfera. Se reportaron avistamientos desde diversas locaciones, incluyendo Bahamas, Islas Turcas y Caicos, República Dominicana, Cabo Cañaveral e incluso Miami, debido a la alta velocidad del cohete durante la explosión.
Como en el incidente anterior, la caída de restos obligó a desviar aviones en las zonas afectadas. Las autoridades cerraron temporalmente el espacio aéreo para asegurar la seguridad de las aeronaves.
¿Problemas con la Block 2?
Las dos explosiones consecutivas han puesto el foco en la Starship Block 2, la nueva generación del cohete. Si bien SpaceX aún no ha confirmado la causa exacta de la falla en la Starship 34, la similitud con la explosión de la Starship 33, atribuida a un fenómeno de resonancia armónica, sugiere posibles problemas de diseño o ingeniería en esta nueva iteración.
La Block 2 presenta mejoras significativas respecto a su predecesora, incluyendo tanques de mayor capacidad, mejoras en el escudo térmico y modificaciones en los sistemas de propulsión. A pesar de estas mejoras, la doble falla es un serio revés para el programa.
El futuro de Starship
SpaceX ha demostrado su determinación para superar los desafíos, y es probable que se realicen nuevas investigaciones para determinar la causa exacta de las fallas y corregir los problemas detectados. El futuro del programa Starship queda por definir, pero estos dos incidentes han puesto de manifiesto los enormes desafíos que supone la ingeniería de esta nueva generación de cohetes.
Fuente: Xataka
