El AI Pin de Humane, un dispositivo prometedor creado por ex empleados de Apple, se ha convertido en el primer gran fiasco de la era de la IA. Concebido para reemplazar al smartphone, este dispositivo con IA integrada, cámara, proyección láser y procesador Qualcomm, no logró conquistar el mercado.

Un fracaso comercial anunciado

Desde su lanzamiento, las expectativas no se cumplieron. Tras un decepcionante desempeño comercial, con más devoluciones que ventas, HP ha dado el golpe final. La empresa ha adquirido una parte significativa de Humane, incluyendo más de 300 patentes y la plataforma de IA CosmOS.

El fin del AI Pin

La decisión de HP tras la adquisición fue contundente: detener la venta y el soporte técnico del AI Pin. A partir del 28 de febrero, los dispositivos dejarán de conectarse a los servidores de Humane, perdiendo el acceso a imágenes, vídeos y notas. Todos los datos serán eliminados permanentemente.

¿Qué busca HP?

HP busca acelerar el desarrollo de la IA en sus propios productos, considerando la IA como un componente fundamental para el futuro de los ordenadores. La compra de Humane les proporciona la propiedad intelectual necesaria para lograrlo.

Un pisapapeles de 700 dólares

El AI Pin, con un precio de 700 dólares, se convertirá en un costoso pisapapeles. Sus funciones se limitarán a las capacidades offline, como la comprobación del nivel de batería. Este suceso plantea interrogantes sobre la viabilidad de dispositivos 100% dependientes de un servidor, especialmente en el sector de la IA.

Lecciones aprendidas

El fracaso del AI Pin es un duro golpe para el sector de los productos de IA, generando dudas sobre la sostenibilidad de dispositivos que dependen totalmente de la conexión a un servidor. El futuro de la IA en dispositivos portátiles parece requerir una mayor evaluación de la dependencia de las infraestructuras online.

Fuente: Xataka